Capitulo 37

Capítulo 37

Mariano estaba en su despacho, estaba terminando de revisar tres casos, tres casos que hace un tiempo había rechazado. Ahora estaba decidido a aceptarlos, no le dejarían dinero, pero si le mostrarían porque había elegido ser abogado. Él en un primer momento había estudiado leyes para ayudar a los demás, tiempo después se había visto con una familia que mantener, no había tenido otra manera de subsistir. Ahora era distinto y quizás era hora de ayudar a los demás.

Suena su celular

Mariano: Hola… ¿Dónde … ¿Seguro que no hay nadie más?... Vigilen bien, voy para allá. –corta, rápido sale del despacho- Llego la hora de volver a vernos las caras –susurro.

Euge ya estaba en el octavo mes de embarazo, en esos dos meses que habían pasado desde que Nico le mandara la canasta con el peluche, tenía noticias de él todos los días, hacía un mes que había vuelto a Buenos Aires, casi todas las tardes salían.

Nico: ¿Quieres ir a ver alguna película?

Euge: podemos ver alguna aquí si no te molesta. Estoy cansada, no tengo muchas ganas de salir –confiesa

Nicolás: si, por mí no hay problema. ¿Quieres que vaya a buscar alguna?

Euge: tengo varias –se acerca a un mueble, lo abre  y se ven varios CD de películas, entre ambos eligen una, una de la empleadas les lleva un bols lleno de pochoclo, los se ponen a ver la película.

No tenían nada, pero eran grandes compañeros, nadie podía negar lo bien que se llevaban.

Mery estaba tratando de diseñar, pero su imaginación solo tenía a Pablo en la cabeza, nunca vestido, siempre desnudo, sin nada de ropa.

Mery: tanto me queje de Lali y yo estoy igual  -suspiro hundiendo su cabeza en los papeles que tenía en su escritorio.

Con Pablo no tenía nada serio, tenían sexo cuando querían, en especial cuando ella quería, amaba dejarlo con las ganas, le gustaba tener poder sobre él.

No tenía caso estar en el trabajo, no podía pensar, así que decidió irse, al llegar a su casa sonrió, él estaba allí, estaba en su auto enfrente al edificio de apartamentos, al verla baja y va hacía ella

Pablo: hola

Mery: hola –ajando de su auto y quedando frente a frente- No te esperaba

Pablo: necesita verte, no sé que me hiciste rubia, pero no dejo de pensaren ti, estás metida en todo lo que hago, no logro concentrarme, siempre estás, estás en mi mente y al parecer no quieres irte. –La acerco a él y la beso.

Mery no pensó, solo respondió al beso, fueron rápido hacía el apartamento de ella, apenas abrieron la puerta se fueron derecho al sofá, su deseo no les daba más tiempo, la ropa lo único que hacía era molestar, rápido se la sacaron y fueron uno.

Horas después estaban abrazados en el sofá.

Mery: creo que ambos estamos locos –sonrío en el pecho de él.

Pablo: -sonriendo- Puede sr, pero tú amiga y mi hermano nos ganan- ella lo miro sin entender- Los encontré teniendo sexo, a pesar de la panzota de cinco meses de tu amuga, esos dos no paran por nada –ambos ri8eron.

Mery: mientras no le hagan nada a mi ahijado o ahijada, no tengo problema.

Pablo: te recuerdo que son dos

Mery: si, pero solo uno o una será mi ahijado o ahijada, ninguno de los dos se ha dejado ver

Pablo: lo sé, yo también quiero saber que van a ser, espero que además de sobrinos, tenga a alguno de ahijado. Mery, -la mira y ella a él- ¿Qué vamos a hacer con lo que pasa entre nosotros?

Mery: me  lo he preguntado mil veces, no sé. Por ahora podemos seguir así, nunca me gusto lo formal –confeso

Pablo: somos dos, la besan y vuelven a ser uno.

Peter estaba intentado entender porque no podía ponerse de acuerdo con Lali, no concordaban en casi nada, con la casa ya se había rendido, jamás encontrarían una que les gustará a los dos. Sin contar en que no estaban de acuerdo ni con la decoración del apartamento en que vivían.

Esa tarde habían discutido por el color de las paredes, él quería que siguieran azules, ella quería un color más claro, un beige. Sin contar que la madre y el padre de ella estaban en Buenos Aires y los iban a visitar todos los días. Por eso había decidido ir al despacho, no tenía mucho trabajo, pero estaba tranquilo. Sentía que en el único lugar que se entendía con Lali era en la cama.

Reviso unos cuantos papeles, hablo con Paula, había dejado de ser la señora Recca después del juicio, ahora trabaja como secretaria para ellos, no lo necesitaba económicamente, pero si para distraerse, se habían hecho amigos, ella siempre lo escuchaba, lo aconsejaba

Paula: tendrías que decirle lo que sientes

Peter: ella está muy sensible, no se puede decirle nada sin que llore.

Paula: Pitt, ella tiene que ceder un poco, no siempre ser tú él que ceda.

Peter: lo sé, pero no me gusta verla mal. Quizás más adelante, cuando sus hormonas se estabilicen podamos hablar bien.

Paula: quizás, o quizás ella se aproveche de estar a cargo de los dos bebés, se victimice y tú por bueno cedas. –Obviamente algo de cizaña metía, él le gustaba y mucho.

Peter: si, no sé. El tiempo sabrá –sentía temor de que ella tuviera razón.

Lali estaba pensando lo que había dicho su madre, quizás ella tenía razón, le costaba ceder, pero en una relación a veces había que ceder, Peter ya había cedido bastante, le tocaba a ella.

Sus hormonas últimamente estaban bastante alteradas, lloraba por todo, lo más mínimo la hacía llorar, demasiado sensible para su gusto, aunque también estaba bastante excitada varias veces al día, eso era la parte buena. Ya que en el único lugar que no discutía con Peter era en la cama.

Estaba por ir a la heladera a buscar un trozo de torta, siente un ruido, mira hacía la ventana

Lali: ¿Qué haces acá? –sorprendida

-Necesito tu ayuda de nuevo, se que te dije que sería una vez, pero eres necesaria

Lali: como verás no creo ser de ayuda –acariciando su abultado vientre

-Lo serás, te puedo asegurar que nada te pasará, además te necesito para dentro de cinco meses, ahora solo quiero que leas un par de cosas. –Se acerca y le da unas carpetas- Adentro hay una tarjeta, cuando termines contáctate conmigo. –Se fue por la ventana sin más

Lali: ni siquiera le dije que si –susurro- Siempre igual –suspiro, vio la carpeta, la llevo hacía el dormitorio, la guardo en su cómoda. Siente la puerta, seguro era Peter, no le erro, el apareció en la habitación

Peter: ¿Qué hacías?

Lali: arreglaba mi ropa –mintió- No encontraba nada, así que me puse a arreglar –mentira, pero no le quedaba de otra

Peter: -se acerca, la besa- ¿Cómo estás?

Lali: cansada, pero bien –le sonrió- ¿Mucho trabajo?

Peter: si, bastante- mintió, solo tenía un par de casos, nada muy importante, pero no tenía muchas ganas de estar en el apartamento y eso era una buena escusa

Lali: Pitt, estuve pensando y creo que la última casa que vimos no estaba tan mal

Peter: ¿En serio? –sorprendido

Lali: si, lo estuve pensando y después de un par de arreglo estaría bien

Peter: pero si fue hecha a nueva –sorprendido

Lali: lo sé, pero los colores no me gustan,  el cuarto principal tiene un balcón muy grande y la escalera es muy angosta. Arreglando eso quedaría bien –sonrió- “Después de hacerle un par de arreglos más, pero eso no tienes porque saberlo” –pensó

Peter: está bien, estoy de acuerdo en cuanto a la escalera, además es muy oscura, lo del balcón me parece excesivo y los colores lo podemos ver –ella asintió

Lali: “Nunca pensé que fuera tan difícil convivir con alguien. Benjamín era bastante práctico y estaba de acuerdo conmigo casi siempre” –pensó

Peter: “¿Qué tendrá de malo los colores más fuertes? Siempre tiene problemas con los colores, sin contar el balcón, para mí está perfecto. Pero ella cedió en algo, eso es un paso” –pensaba

Mariano: ¿Dónde está?

-En el banco, frente al estanque, no hay nadie más

Mariano: perfecto, vigila que no se acerque nadie, en especial él –asiente y va ver la zona, mientras él se dirige al estanque del parque, estaba nervioso, era mucho tiempo, mucho tiempo sin verse. –Hola

-Mariano –gira con sorpresa al reconocer su voz- ¿Qué haces acá?

Mariano: necesitamos habar Emilia y lo sabes –se sentó a su lado

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Gracias por los 15 comentarios. Dedicado a Caaroo Yaffe primera en comentar.

Como verán, se avecinan problemas y ya hay nuevos secretos. ¿Qué pasara?

Espero les guste, mañana subo más nove, ya tengo bastante avanzado el capítulo.

¿Con quién habrá hablado Lali? ¿Qué pasará entre ella y Peter? ¿Qué querrá Mariano con Emilia?

Varias preguntas por contestar, habrá que ver que pasa.

Marchu: mejorate pronto y no me quieras matar jajaja.

Se las quiere

Sus comentarios son mimos al alma

Besos

Vicky ♥