Capitulo 35

Capitulo 35

Peter: lo sé, pero me gustaría amanecer contigo a mi lado, que me despiertes cuando sientas que se mueven en la pasan, cuando tengas algún antojo. Después cuando ya estén con nosotros, levantarnos juntos, verlos dormir, despertarlos.

Lali: -emocionada -eres un tierno -lo besa

Peter: ¿Es un sí?

Lali: -asiente con la cabeza- Pero con una condición. –seria

Peter: ¿Cuál?

Lali: que si aparece alguien en tú vida me lo digas, igual que yo te diré si me sucede a mí. –pidió

Peter: está bien, pero no quiero que eso me separe o te  separe de los niños. Yo siempre seré el padre de ellos al igual que tu siempre serás su madre. En cuando a ellos, no habrá nadie más.

Lali: me parece bien, estoy de acuerdo –él la besa y ella responde a ese beso.

Peter: ¿A qué hora salimos para Buenos Aires? –la recuesta a su pecho

Lali: en dos horas, perdón por no avisarte antes –se disculpo

Peter: tranquila, tengo la maleta pronta, nunca la desarme, saco la ropa de allí –ella le sonrió y volvieron a besarse.

Dos horas después, los dos junto a Pablo y Mery estaban en el aeropuerto, esperando para irse a Buenos Aires. Nico, Nicolás, Emilia y Cande estaban para despedirlos.

Nicolás: no me gusta que te vayas -triste

Lali: pero es lo mejor, aunque yo sienta este lugar mi casa, no lo es. Podrás ir a verme cuando quieras. –lo abrazo fuerte, lo quería demasiado.

Nico: yo voy en unos días, Así qué no te libraras de mí –le sonrió

Emi: en tú cartera, puse la llave de la casa que tenemos en Buenos Aires y no quisiste utilizar

Lali: mamá, te lo agradezco, pero ya no pertenezco a la familia real, esa casa es para ustedes. ¿Por qué no se quedaron allí cuando fueron? –intrigada

Nicolás: la estaban arreglando, pero ya está lista y quiero que estés allí. –Ella lo mira- Tú eres nuestra familia, perteneces a ella, además tú abdicaste, pero el parlamento aún no acepto tú abdicación –le recordó

Lali: papá, no intervengas –pidió

Nicolás: no lo haré –aseguro

Cande: te voy a extrañar –la abraza

Lali: puedes ir a visitarme cuando quieras, toma –le da un papel- allí está la dirección donde voy a vivir por ahora

Mery: ¿Perdón? –Le quito la hoja a Cande y miró la dirección- ¿Nos vamos a mudar?

Peter: Lali se va a vivir conmigo, es lo mejor para nosotros y para los bebés.

Pablo: si quieres yo me voy a vivir contigo –a Mery

Mery: antes prefiero vivir con una víbora –aseguro

Terminaron de despedirse y se fueron en la avioneta.

Nicolás, Emilia, Nico y Cande miraban como poco a poco la avioneta desaparecía en el cielo.

Nicolás: no quería que se fuera. –Triste- Allá está Mariano

Nico: papá, ella te quiere a ti

Cande: si, jamás dejará de ser tú hija del medio –lo abraza

Emi: a mí me preocupa lo que vaya a ser Mariano, él no la quiere

Nico: le toca un pelo y va a tener que enfrentar ser el culpable de que las relaciones de su país se rompan con Eudamón –decidido

Dos semanas después

Lali estaba acostada en la cama mirando una película, ese día no se sentía muy bien, sus nauseas matutinas estaban insoportables, aunque parecía que se estaban yendo, al menos por ese día. Peter había ido al trabajo, porque ella se hizo la que estaba bien, no quería que el faltará al despacho, sabía que había varios casos importantes.

Suena el timbre, ella suspira, se levanta despacio. Está segura que debe ser Mery, ya que ella la llamo y quedo de ir. Abre la puerta y se sorprende

Lali: ¿Tú?

-Sí, ¿Puedo pasar? –ella aún sorprendida asiente, la persona pasa- ¿Tanto te sorprende mi visita?

Lali: si, no te esperaba Eugenia –sincera, se sientan frente a frente.

Euge: se que no me esperabas, pero decidí venir. Yo ya te dije que no quiero perder el contacto contigo, eres mi hermana y quiero que seamos hermanas, que nuestros hijos se críen juntos, se críen como debimos criarnos nosotras

Lali: Eugenia, ya te dije que no estoy segura, necesito tiempo

Euge: lo que necesitas, lo que necesitamos es pasar tiempo juntas, el médico me saco el reposo, me dijo que tengo que tratar de no excederme, pero puedo ir de compras y a eso vine. Quiero que vayamos de compras las dos, demoño está oportunidad

Lali: -suspira- Está bien, pero te advierto que estoy con nauseas

Euge: tranquila, suelen pasar después de las diez y ya son diez y cinco –sonrió.

Lali: voy a cambiarme

Euge: -asiente- te espero

Lali fue a cambiarse, quizás tener contacto con Euge no fuera malo, después de todo eran hermanas

Peter estaba terminando de revisar un caso, un caso que no le cerraba muy bien, había algo allí que se le hacía raro, pero aún no sabía que era. Tocan la puerta, él da el consentimiento para que pase la persona.

Peter: Mariano ¿Necesitas algo?

Mariano: si, me gustaría hablar con Mariana ¿Sabes si ella quiere hablar conmigo?

Peter: sabes la respuesta. Ella esta dolida, ni siquiera quiere ver a Eugenia, aunque Euge iba a ir a verla hoy.

Mariano: lo sé, espero que tenga suerte suspiro. –Lo mira- ¿Tampoco va a aceptar mi propuesta?

Peter: eso no lo sé, ella no me ha comentado nada, además me gustaría que descanse, lleva dos niños en su vientre, tiene que estar tranquila, mañana tenemos médico, vamos a ver cómo está todo.

Mariano: ¿Cómo está llevando el embarazo?

Peter: bien, como te dije se cansa y eso, pero es un embarazo mejor que el que lleva Euge.

Mariano: cualquier cosa me dices. –Lo mira- Es mi hija, solo espero que me dé una oportunidad para poder conocernos, pasar tiempo juntos

Peter: solo el tiempo sabe. –Suspira y cambia el tema- Estaba revisando el caso de robo y asesinato, hay algo que no me cierra, todo parece condenar al cortador de pasto, es un caso muy fácil para mi gusto, de seguro la señora Recca ganará el caso

Mariano: aunque a veces las cosas sean raras, las pruebas lo demuestran, además la señora Recca lo reconoció como él asesino de su marido.

Peter: si, quizás sea porque es raro tener un caso tan fácil de ganar. –Vuelve a suspirar

Mariano: Bueno, -se levanta del sillón en el que se había sentado- voy a terminar el papeleo que tengo y después voy a ir a almorzar con un nuevo cliente.

Peter: si, yo quede de almorzar con la señora Recca, ella quiere saber cómo va todo –Mariano asiente y se retira de allí

Mery estaba por salir a casa de Lali cuando está le pasa un mensaje avisándole que iría de compras con Eugenia.

Mery: está mina se hace la mosca muerta y me quiere sacar a mi mejor amiga, pero no la voy a dejar –salió rápido, en el ascensor se encontró con PABLO- ¿Qué haces acá?

Pablo: venía a verte –la mira a los ojos- ¿A dónde vas?

Mery: a impedir que Eugenia me quite a mi hermana del alma

Pablo: -la acerca hacía él y le sonríe- Siempre va a ser tu hermana, no seas celosa –la besa  y a ella se le pierde el mundo, como siempre cuando está en los brazos de él.

Continuará…

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Gracias por los 20 comentarios. Dedicado a Carola Esposito primera en comentar.

Bueno se que demore mucho, pero como saben estuve sin internet y estoy bastante complicada con los parciales y los exámenes.

Marchu: tranquila, ahora va ir un poco más rápido y después se va a empezar a complicar un poco.

Chias con el tema del twitter nuevo, perdí los twitt para avisar, así que les pido de favor que las que quieren que les avise por twitter lo dejen en el comentario.

Espero les guste el capítulo, hice mi mejor esfuerzo, aunque parezca un poco sonso tiene bastante información.

Voy a tratar de subir mañana o el sábado.

Se las quiere

Besos

Sus comentarios son mimos al alma

Vicky ♥